El paseo nocturno con los canes, comentando cómo ha ido el día, la cena en el sofá, fines de semana de paseo al campo con los amigos, las plantas de patio que te sorprenden un día de otoño gris floreciendo...
Roque y Rita con un entusiasmo canino nunca comparable al de las personas...
Los momentos de ocio con mis telas y mi máquina de coser sin tener que rendir cuentas con nadie...
Por suerte las cosas buenas superan a tan poco talento y tan poca imaginación de la chulería del día a día.
En fin, pero sigamos con los perros, las flores y los colores... y cómo no los humanos simpáticos que me encargan cositas ;)
Hoy le ha tocado a Eulàlia . Un bolso redondo al puro estilo Montserrat Saltó y uno triangular.
El triangular con la tela, cómo dice Bruno, que parece una bandera.
Gracias Eulàlia¡¡¡¡
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